Nike apuesta por la experiencia también

Elliot Hill, el nuevo CEO de Nike, un veterano de Nike con más de 30 años de experiencia, regresa a la compañía como CEO con la misión de revitalizar la marca y recuperar su crecimiento.
* Un hombre de la casa: Hill conoce a fondo Nike, habiendo ocupado diversos cargos de liderazgo a lo largo de su carrera. Su profundo conocimiento de la empresa y su cultura lo convierten en una figura ideal para liderar este nuevo capítulo.
* Retos a superar: Nike enfrenta una serie de desafíos, como la desaceleración de las ventas y la pérdida de cuota de mercado frente a la competencia. Además, la gestión anterior, bajo el liderazgo de John Donahoe, generó cierta controversia por la ruptura de relaciones con distribuidores y la falta de foco en la innovación.
* Un nuevo enfoque: Hill se espera que aporte una nueva visión a la compañía, aprovechando su experiencia y pasión por el deporte. Su objetivo es no solo recuperar las ventas, sino también devolver a Nike su imagen de marca «cool» y líder de la industria.
* Un líder con historia: Hill ha sido testigo de momentos clave en la historia de Nike, como el lanzamiento del eslogan «Just do it» y la construcción de la línea Jordan. Su experiencia y relaciones personales, como la que forjó con Michael Jordan, le brindan una ventaja única.

En resumen, el nombramiento de Elliot Hill como CEO de Nike representa una apuesta por la continuidad y la experiencia. La compañía espera que su liderazgo ayude a superar los desafíos actuales y a devolver a Nike a su posición de liderazgo en el mercado deportivo.

Los principales puntos a destacar son:
* Retorno de un veterano: Hill regresa a Nike para liderar la empresa en un momento crucial.
* Desafíos de la compañía: Nike enfrenta problemas de crecimiento y pérdida de cuota de mercado.
* Expectativas: Se espera que Hill revitalice la marca y la vuelva a posicionar como líder.
* Experiencia y conocimiento: Su larga trayectoria en Nike le proporciona una ventaja única.

H&M, Inditex,… la moda tradicional contraataca ante la amenaza Temu, Shein,… (fast fashion)

La creciente competencia que enfrentan las grandes marcas de moda, como Inditex y H&M, ante la irrupción de gigantes del  como Shein y Temu. Estas últimas compañías, caracterizadas por sus precios extremadamente bajos y su modelo de negocio basado en la producción masiva y rápida, han revolucionado el sector.

Las principales estrategias de las marcas tradicionales para hacer frente a esta amenaza son:

Reinvención digital:
Live shopping: Imitando el éxito de plataformas asiáticas como TikTok, marcas como Zara están implementando formatos de venta en vivo para crear una experiencia de compra más interactiva y atractiva.
Personalización: Las marcas están invirtiendo en tecnologías como la inteligencia artificial para ofrecer recomendaciones personalizadas a cada cliente.
Experiencia omnicanal: Se busca integrar la experiencia de compra online y offline, ofreciendo a los clientes la posibilidad de comprar en línea y recoger en tienda, o de reservar productos en línea y probarlos en tienda.

Fortalecimiento de las tiendas físicas:
Experiencia de compra única: Las tiendas físicas se están transformando en espacios experienciales, donde los clientes pueden interactuar con los productos de una manera más inmersiva.
Integración con el canal online: Las tiendas físicas se complementan con el canal online, ofreciendo servicios como el click & collect.

Apuesta por la calidad y la sostenibilidad:
Posicionamiento premium: Marcas como Inditex están subiendo de gama, ofreciendo productos de mayor calidad y a precios más elevados.
Compromiso con la sostenibilidad: Las marcas están comunicando cada vez más sus esfuerzos por reducir su impacto ambiental y social.

Los desafíos de Shein y Temu:
Regulaciones: La creciente preocupación por las prácticas laborales y ambientales de estas empresas está llevando a gobiernos de todo el mundo a considerar la imposición de nuevas regulaciones.
Complejidad logística: Expandirse a nuevos mercados y cumplir con las normativas locales puede resultar costoso y complejo.
Falta de transparencia: La falta de información sobre las condiciones de producción y los materiales utilizados puede generar desconfianza entre los consumidores.

En resumen, la industria de la moda está experimentando una transformación profunda, impulsada por la competencia de nuevos actores y por los cambios en el comportamiento de los consumidores. Las marcas tradicionales están respondiendo a estos desafíos a través de una combinación de estrategias digitales y físicas, buscando diferenciarse y ofrecer una experiencia de compra más personalizada y sostenible.